Inicio Salud y psicología Mujer,

Mujer,

siempre bella, siempre trabajadora

El día 8 de marzo es el día de la mujer trabajadora, este día intenta recordar la lucha de la mujer por integrarse y participar en la sociedad con igualdad respecto al hombre. Aunque a estas alturas nos da un poco de risa, como mujeres que somos, que exista un día al año para recordar que todavía hay mucho por hacer. No hay que mirar hacia los cambios respecto a la mujer sino respecto al hombre. Si el hombre no desarrolla su sentido femenino, sin que tenga que renunciar a su condición sexual, la mujer no podrá evolucionar. Porque en estos cien años de avances hacia la igualdad, lo único que hemos hecho es retroceder en cuanto a calidad de vida porque no nos hemos hecho más mujeres sino que hemos querido ser más masculinas: trabajar como hombres, pensar como ellos… Ninguna sociedad será lo bastante igualitaria y democrática hasta que no reconozca las diferencias y ayude a tolerarlas y a desarrollarlas. Entendemos y respetamos mejor a cualquier minoría que a la mujer como concepto genérico global. No somos iguales y eso es un don de la naturaleza, no somos ni mejores ni peores, somos solo mujeres. 

Por todo esto desde INÈDIT queremos reivindicar nuestro lado femenino, nuestra estética, porque para nosotras es importante sentirse guapa por dentro y por fuera, por eso os presentamos una técnica que se usa en paramedicina y estética, también en hombres, se trata de la micropigmentación.

 

 

La micropigmentación es una técnica semipermanente con la cual se introducen y depositan pigmentos en las capas más superficiales de la piel. Es allí donde existe una permanente renovación celular y, por lo tanto, las micro partículas del pigmento se van degradando entre los dos y cinco años, dependiendo del tipo de piel, de los cuidados después del tratamiento de la zona tratada y del tono del pigmento escogido.

 

Usos paramédicos y oncológicos

Los usos más habituales en paramedicina de esta técnica son los que camuflan las cicatrices periareolares y en la creación de una o de las dos areolas inexistentes. Se logra disimular cicatrices, mejorar cambios de pigmentación en patologías cutáneas tales como el vitíligo, reconstruir cejas en tratamientos de quimioterapia, también alopecias. 

 

Usos en medicina estética

Los usos estéticos más extendidos se aplican en las zonas faciales como en las cejas, ojos y boca. El resultado es muy agradecido y en el caso de las cejas se consigue crear un nuevo diseño, redensificar una ceja poco densa o bien estructurarla de nuevo. En los ojos, se redensifica las pestañas de manera natural e imperceptible y se enmarca la mirada con un perfilador rellenando los espacios entre las pestañas. La boca es el elemento facial que más padece las adversidades climáticas y el paso de los años sufriendo asimetrías y perdiendo volumen pero con la micro pigmentación se redefine el contorno labial y se corrigen las asimetrías, ganado brillo y textura de forma natural.

 

 

Las operaciones de estética más solicitadas

 

La crisis económica no ha hecho disminuir la cifra de intervenciones estéticas, según datos aportados por la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) el primer país en este tipo de operaciones es Argentina, le siguen México, Estados Unidos y luego está España que adelanta, y en mucho, a Francia, Alemania y Brasil. Otras cifras explican que por cada diez mujeres que entran en el quirófano lo hace un hombre.

 

La intervención más demandada es la de aumento de mamas, seguida por la liposucción, la blefaroplastia, o intervención de los párpados y la rinoplastia que significa la intervención de la nariz buscando una mejora estética.

 

Una intervención de aumento de mamas requiere de unas dos horas, la mayoría de ocasiones se anestesia totalmente al paciente y requiere de unas 48 horas de reposo y dos semanas sin hacer esfuerzos físicos. El precio puede oscilar entre los 4.000 a los 7.000 euros en función del cirujano y la prótesis elegida.

 

Liposucción consiste en remover los depósitos grasos en abdomen, espalda, caderas, muslos por medio de succión a través de cánulas o tubos delgados, dejando cicatrices mínimas de no más de 1 cm de largo. La sesión puede durar de 30 minutos a 4 horas, y la anestesia suele ser local epidural pudiendo ser general en función de la cantidad de los depósitos grasos que tenga el paciente. El precio varía mucho en función de la zona a tratar pero como orientación está sobre los 2.000 euros.

Sin Comentarios

Escribe un comentario

Tu correo electrónico no se publicará