Alícia al país dels mòbils se ha convertido en una de las propuestas teatrales más originales de los escenarios en Barcelona. De nuevo ha regresado al Teatre Romea dentro de su programación familiar. Marta Buchaca propone una versión renovada del clásico de Lewis Carroll para llamar la atención sobre el uso coherente de las nuevas tecnologías. En palabras de la dramaturga: «En este País de las Maravillas, la reina, en lugar de ser la reina de corazones, es la reina de los móviles. Una mujer que, como muchos de nosotros, no se puede separar de su teléfono ni un segundo».

Sinopsis

El día que Alicia cumple doce años le regalan su primer móvil, pero el conejo blanco se lo roba y ella le persigue para recuperarlo. La joven tendrá que recorrer el País de las Maravillas hasta llegar al palacio de los móviles, donde encontrará a una reina que pierde la cabeza por las nuevas tecnologías y que le pondrá las cosas muy difíciles para volver a casa.

Con este viaje, la protagonista descubrirá el valor de la imaginación y de la lectura, y aprenderá a utilizar las tecnologías con criterio. La historia que todos conocemos, pero ambientada en nuestros tiempos, donde los niños conviven con la tecnología a diario.

Adaptación del clásico literario

Este espectáculo familiar, adaptación moderna del clásico literario de Lewis Carroll, busca advertir sobre los peligros de la dependencia excesiva de la tecnología, en especial en aquella que se refiere a la telefonía móvil. El montaje, que ya se había estrenado en 2017, ha regresado con una versión actualizada. En ella cuentan con una estética moderna y proyecciones creadas por Desilence, en un momento en el que el debate acerca de la adicción a estas herramientas, sobre todo en la adolescencia, está más vigente que nunca.

«Esta obra clásica desde siempre nos ha apasionado en Viu el Teatre y por este motivo decidimos hacer esta adaptación del siglo XXI de la mano de Marta Buchaca, y el resultado ha sido un espectáculo de rabiosa actualidad, fresco, dinámico y con un lenguaje audiovisual para hablar de tú a tú con las nuevas generaciones», comenta la productora Gisela Juanet.

El clásico literario de Lewis Carroll se reinventa, buscando advertir sobre los peligros de la dependencia excesiva de la tecnología, en especial al móvil. 

Según la compañía, la obra no pretende demonizar la tecnología ni los teléfonos móviles, sino enseñar a hacer un uso responsable de los mismos. Su fin consiste en llamar la atención a los espectadores, en especial a los más jóvenes, para que luego no se arrepientan de haber contemplado su vida a través del objetivo de una pantalla digital. Tal y como asegura Marta Buchaca, la autora del texto: «El móvil es un arma de doble filo y pienso que por culpa de esta máquina nos perdemos muchas cosas, incluso la capacidad de concentración, por ejemplo, yo antes leía libros, ahora confieso que lo compagino con el móvil».

En efecto, a través de los personajes de la obra y las vicisitudes de Alicia, la compañía logra transmitir hábitos saludables. Esta batería de consejos va dirigida a los niños y jóvenes, pero también al público adulto. «La obra está pensada para agradar a los más pequeños, pero también para hacer pensar a los mayores: los adultos somos el modelo que siguen los pequeños y pequeñas de casa», explica Buchaca.

Dos realidades en un mismo mundo

En la plaza de Catalunya, no muy lejos del lugar donde se interpreta esta obra, se instaló el pasado mes un stand en el que se publicitaba el lanzamiento de un nuevo móvil de una conocida marca. Los fines de semana colas inmensas de personas esperaban acceder al mismo. Y entre el público sorprendía ver a familias enteras y jóvenes, quienes deciden emplear su tiempo de ocio en esta actividad. Mientras, la sala del Teatre Romea cuelga en casi todas las sesiones el cartel de entradas agotadas. En ellas los más pequeños de la casa guardan silencio durante la representación, y disfrutan de una actividad cultural de una forma tradicional y sin móviles.

El teatro es una de las mejores demostraciones artísticas para que los menores desconecten de los móviles durante unas horas. Una manera de enseñarles que hay mucho por descubrir más allá de la pantalla.

De estas dos miradas subyace una enseñanza muy a tener en cuenta. La tecnología es una herramienta que ayuda en el día a día. Sin embargo, los expertos educadores aseguran que no todo debe pasar a través de ella. Demostraciones artísticas como el teatro hacen que los menores desconecten de los móviles, tablets, ordenadores o videoconsolas. Una manera de enseñarles que hay mucho por descubrir más allá de la pantalla. Todo un mundo de maravillas.